domingo, 3 de marzo de 2019

Tiempo





Esto trata de tiempo, de destiempo, de distancia. De miedo y ansiedad que atenaza mi estómago como una llave inglesa apretando una tuerca. De la sorpresa que da un vuelco al alma para explicarle que nada de lo que daba por bueno es cierto, de una voz que te dice que ha llegado el momento de dejar atrás el invierno, de sacudirse el polvo del corazón y volver a encenderlo.
Tiempo de sentirse viva.
Tiempo de pensarte a cada instante.
Tiempo de empezar de nuevo y de esperar que el tiempo decida cuanta distancia dejar entre tú y yo.

Con el paso de los años



Con el paso del tiempo, una aprende.

Aprende que las personas que hablan y hablan de lo mucho que saben de las cosas, no tienen ni idea. Como yo, ahora mismo.
Que cuando alguien te hace partícipe de sus pasiones, es que te aprecia y confía en tí.
Que debo hacer siempre lo que me dé la real gana (sin perjudicar a nadie, ojocuidao)
Que las personas verdaderamente buenas no son conscientes de que lo son.
Que la inteligencia no se mide con títulos ni con lecturas.
Que el poder real reside en una conciencia tranquila.
Que se puede querer de muchas formas y hacer daño de muchas más formas que, de lejos, se parecen a querer.
Que todos estamos perdidos. Pero que tarde o temprano nos encontramos.
Que una buena defensa nunca es un ataque, y que no hay ataques buenos.
Que lo más difícil y necesario para ser feliz es perdonarnos a nosotros mismos.
Que después de perdonarse, hay que quererse mucho.
Que el sentido del humor lo hace todo más fácil.
Que lo complicado nunca suele ser lo mejor.
Que la humildad no nos hace más débiles.
Que me he equivocado mil veces y me equivocaré mil veces más.
Que si te dan a elegir entre "tus hijos o yo", dales un patadón y mándales bien lejos.
Que lo bueno puede engordar.
Que el respeto es mucho más valioso que la comprensión.
Que la comprensión es tan valiosa como el amor.
Que quien insulta, manipula y ofende, está asustado.
Que quien engaña, miente y traiciona, está inseguro.
Que hay que pensar menos y hacer más el payaso.
Que nunca dejes de ver a tus amigos, ni de reirte ni de llorar con ellos.

Que probablemente todo esto sólo me sirva a mí y a nadie más... y de momento, me va bien ;-)