Como la tierra, redonda, con sus múltiples conexiones que nos unen. En Kafka en la orilla, Murakami escribe: "La tierra va rotando sobre su eje. Y sin ninguna relación con ello, todos vivimos dentro de un sueño".
La idea que tengo de la vida, es que debe ser lineal, siempre hacia delante, evolución constante. Pero tengo la sensación que va adornada con pequeñas esferas, unas mas grandes que otras. Experiencias o anécdotas que están obligadas a cerrarse dentro de un limitado espacio de tiempo.
Sin dudarlo la levanté, la pregunté si se encontraba bien y si necesitaba que llamara a una ambulancia. "Ha sido un tropezón, que ya no veo", me dijo. El marido me contó que llevaba casi veinte minutos esperando que pasara alguien, me dieron las gracias y cada uno seguimos nuestro camino.
Esta anécdota, es un pequeño círculo adornando mi lineal vida. Breve, pequeño, sencillo y para mi, muy bonito. Y me vienen a la mente recuerdos, como si fuera un sueño, de un montón de preciosos círculos, de brillantes esferas que hacen más bonita mi vida.