martes, 26 de julio de 2016

Hace un montón...


Se termina julio; a punto está de estrenarse agosto y no para de enredarme el pensamiento con un montón de listas en la cabeza y de cosas por hacer. En esta tarde de aplastante calor me ha dado por pensar en todas aquellos montones de cosas que hace un montón que no hago:

  • Hace un montón que no veo a todas mis amigas juntas, que no salimos a disfrutar de la montaña como antes (Maribel, Marisa, Nuria, Arantxa, son como un bálsamo. Las risas que nos hemos echado juntas!)
  • Hace un montón que no como huevos fritos.  
  • Hace un montón que no salgo con mi chico a tomarme una copa (de más...y que no sea en una boda)
  • Hace un montón que no veo una buena peli en el cine (que no sea de dibujos animados)
  • Hace un montón que no me subo a un avión (con lo que me gusta viajar)
  • Hace un montón que no leo un (buen) libro del tirón (me duermo a los cinco minutos...)
  • Hace un montón que no me hago una limpieza de cutis (y creo que lo voy necesitando)
  • Hace un montón que no tengo calma plena, siempre con un runrun en la cabeza (aunque ahora mucho menos que antes, donde va a parar!)
  • Hace un montón que no voy al Aquopolis (está en mi lista de agosto...qué ganas!)
  • Hace un montón...
Y la lista sigue, es larga. La verdad es que hace un montón que no era consciente de todas esas pequeñas, absurdas y banales quizá, pero especiales cosas que he dejado de hacer. Algunas por falta de tiempo, otras por olvido o cansancio, otras por prioridad. Pero en nada empieza agosto, y quien sabe, quizá elimine de un plumazo algún que otro montón del montón.
                                          

lunes, 11 de julio de 2016

Comiéndote a besos







Fueron 4 los segundos,  
que pasaron hasta que pude encontrarte,  
entre los rostros congelados,  
y paso una eternidad,  
al mirarte y contemplar,  
en tus ojos reflejada, mi mirada.  
Y hoy bendigo las razones,  
casuales por las que decidiste elegir,  
mi banco para esperar,  
para encontrar,  
fue tu roce, fue tu aroma,  
despertando mis hormonas,  
lo que me obligo a cerrar la mente,  
y respirar, y controlar la activación,  
Y mi razón, se convirtió,  
en buscarte entre las calles,  
en los parques, tiendas, bares,  
en sonrisas y destellos de cristal,  
que siguió la consiguió,  
y esta historia comenzó a brillar,  
y un buen día te atreviste,  
a confesarme que tenias,  
tanto miedo a que yo supiera,  
de tu realidad,  
y no comprendes,  
 Que no es tu signo positivo,  
el que invierte en conflictivo,  
las cosas del querer,  
que eres tu quien me revuelve,  
que eres tu quien me enamora,  
tu quien me convierte en la mejor persona,  
y si tengo que gritarte lo que siento,  
te digo que quiero,  
con tu suerte, con tu mierda,  
con pasado, con presente,  
con o sin enfermedad,  
Y tu no ves,  
que quiero seguir comiéndote a besos   
Y es que el miedo que yo tengo,  
Es simplemente no poder,  
Saborearte lo suficiente,  
Es dejarte escapar,  
Es vivir sin apostar,  
Porque quien juega con la mano mas potente,  
Son tus ojos, no tu sangre,  
Los que rastrean mi cama,  
Cada noche y cada día al despertar.  
Y es tu sexo, no tu sangre,  
El que se adentra protegido,  
Entre lo huecos más oscuros,  
De mi intimidad, y no comprendes,  
Que es tu risa no tu sangre,  
Quien contagia la alegría,  
Las esquinas los rincones de mi vida,  
Que eres tu, que no es tu sangre,  
Quien invade de felicidad mis días

Rozalen (escucha...)

Por eso sabemos que seguimos vivos, porque amamos...Eva, Jorge: Que viváis inmensa y pasionalmente por mucho tiempo :-)